Los gemólogos cuentan a su favor con un mercado laboral que parece que aguante muy bien los vaivenes de la economía y que, además, les permite ejercer en otras áreas de especialización.

 

 

 

 

Las joyas seguro que son un regalo que no falta este año a su cita con San Valentín. Y es que son un regalo que nunca pasa de moda, igual que tampoco lo hace la profesión de gemólogo. Esta actividad consiste en identificar, certificar y evaluar las gemas preciosas. Su oficio, lejos de haber pasado de moda, está más vivo que nunca.

 

Considerada por muchos como una rama de la geología, esta profesión avala a sus especialistas como profesionales en identificar a las gemas preciosas por medio de exploraciones de laboratorio, por un lado, y de su experiencia, tanto formativa como profesional, por otro.

 

Entre sus ventajas se encuentran, sin duda, las salidas profesionales porque se trata de un mercado en plena expansión y que no parece conocer los cambios cíclicos de otros sectores laborales. Las opciones profesionales con las que cuenta un gemólogo son variadas aunque las más frecuentes son las relacionadas con la talla o la tasación.

 

Campos de trabajo variados

 

Una persona con formación en gemología tiene que saber que su campo de trabajo se puede ampliar a otras áreas de especialización. Una par de ideas: ¿qué te parecería trabajar mano a mano con un anticuario para dar a conocer la procedencia de una piedra preciosa, o con la policía para dictaminar si la gema es verdadera o se trata únicamente de una imitación?

Las organizaciones europeas que enseñan gemología se reúnen en la Foundation of European Education in Gemmology (FEEG), una iniciativa nacida para intercambiar experiencias con el fin de mejorar el conocimiento de esta rama en los países europeos.

Uno de los primeros objetivos de la FEEG fue lanzar un diploma para todos los graduados que buscaban una puesta en común en todo el continente, razón por la que cada año las organizaciones de la FEEG realizan exámenes para conseguir el título europeo de gemólogo.

 

Título europeo

 

Todos aquellos que tengan en su poder el título de gemólogo por alguna de las instituciones que forman parte de la Foundation of European Education in Gemmology pueden acceder a la titulación europea. A destacar que se realizan dos convocatorias de los exámenes por año.

Pero para ello tendrás que tener una formación previa. ¿Cómo obtenerla? Aunque la gemología, aunque es una rama de la geología sus profesionales no se preparan a través de una licenciatura en este ámbito sino que hay que optar a algunas de las escuelas especializadas existentes.

Los requisitos de entrada a estos centros pasan por tener el Bachillerato y superar una prueba específica de acceso. La duración del curso es de dos años tras los cuales existe la posibilidad de seguir estudiando y especializarse ya sea en diamantes, en gemas sintéticas y así hasta completar un largísimo etcétera.

 

Especializarse como tasador

 

Una de las opciones a tener en cuenta si buscas especialización en el terreno de la gemología es la de la tasación, una de las ramas más complejas pero a la vez más apasionantes del sector y que necesita amplios conocimientos científicos para poder ejercerla.

 

El tasador tiene que conocer las gemas, su composición y formación, las síntesis e imitaciones, los metales… Todo ello combinado con exhaustivos conocimientos de historia, economía, de precios pata conocer los mercados nacionales e internacionales, las subastas, la oferta y la demanda, es decir, es un ámbito en permanente reciclaje.

 

Si ya tienes claro que quieres dedicarte profesionalmente al mundo de la gemología ya sólo te queda elegir centro. A destacar tres de los más importantes del país. Se trata de la Escuela de Gemología de la Universidad de Barcelona, la de la Universidad Autónoma de Madrid y el Instituto Gemológico Español.

 

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