Manuel Olleros, director de la empresa de selección de personal Consulta y Selección

Encontrar un empleo requiere tiempo y dedicación, pero nunca se agotan las oportunidades. Al menos así lo cree Manuel Olleros, autor del libro Cómo encontrar trabajo, editado por Gestion 2000, un manual con interesantes consejos prácticos.

En su libro Cómo encontrar trabajo asegura que «muchas veces la persona contratada no es necesariamente el mejor candidato para el puesto, sino aquélla que sabe cómo buscar mejor». ¿Hasta qué punto una buena técnica marca diferencias?

Lo que quiere decir esta afirmación es que hay personas a quienes los empleadores no llegan nunca a apreciar en todo su valor profesional porque son candidatos que no se dan a conocer lo suficiente, tienen una personalidad retraída o no buscan trabajo donde verdaderamente lo hay.

Mientras que otros, por su forma de ser o porque han aprendido técnicas de búsqueda de empleo, pueden conseguir excelentes resultados, independientemente de que sean los mejores profesionales para ocupar un puesto concreto.

Las técnicas son importantes y se pueden aprender, a unas personas les costará más que a otras y algunas las desarrollan espontáneamente, pero además se necesita motivacióny hay que afrontar la búsqueda de empleo con actitud positiva y la determinación de quien confía en sí mismo.

Antes de empezar a buscar trabajo, recomienda en su libro hacer un ejercicio de autoconocimiento. ¿De qué sirve cuando ya se tiene una profesión?

Naturalmente la orientación profesional debería recibirse en la edad escolar, pero con frecuencia a lo largo de la vida nos hemos de adaptar a nuevas situaciones personales y laborales y a distintos escenarios de empleo.

Los psicólogos especializados, que conocen tanto al individuo como el mundo de las ocupaciones, son los más indicados para orientarnos, pero a menudo hemos de resolver nuestros dilemas por nosotros mismos.

Esto justifica recurrir a un manual de autoayuda como el que he escrito o a las personas que nos rodean ya que pueden decirnos mucho acerca de cómo somos, qué imagen proyectamos, y lo más importante y práctico: si nos «ven» en un trabajo, puesto o ambiente laboral concretos.

Una persona puede ser válida para muchos trabajos diferentes, además hemos de considerar que cuando determinadas ocupaciones o industrias quedan obsoletas, las personas que han trabajado en ellas siguen siendo válidas, pero tienen que descubrir para qué otros trabajos lo son, de ahí que la orientación profesional, o como queramos llamarla -el nombre es lo de menos-, continúe siendo necesaria en la edad adulta.

¿Qué herramientas utilizan los expertos para llevar a cabo procesos de orientación profesional?

Emplean cuestionarios de personalidad, pruebas de inteligencia y aptitud, y cuestionarios de intereses que permiten comparar los intereses de una persona con los que tienen los profesionales que desempeñan con satisfacción una ocupación o familia de ocupaciones.

Más allá de consultar las ofertas de empleo en la prensa e Internet, ¿qué otras acciones son realmente efectivas para encontrar trabajo?

Muchas, por ejemplo, dirigirse espontáneamente a las empresas; acudir a empresas donde trabajan familiares o amigos; inscribirse en las bolsas de trabajo de los centros educativos donde se cursaron estudios; registrarse en las bolsas de trabajo de colegios y asociaciones profesionales; visitar ferias profesionales y ferias de empleo (esto último para jóvenes que terminan sus estudios); enviar el currículum a empresas de selección de personal y búsqueda directa de ejecutivos; acudir al INEM, a los servicios públicos de empleo autonómicos, provinciales o locales, o bien de otros países principalmente de la Unión Europea; buscar empleo a través de agencias privadas de colocación, bolsas de trabajo de las cámaras de comercio, etc. y a través de ETT?s.

En Cómo encontrar trabajo me refiero fundamentalmente a la búsqueda de empleo en empresas privadas, pero existen otras vías como el empleo público o el autoempleo autónomo o creando una empresa.

El «networking» o red de contactos se menciona habitualmente como uno de los mejores canales de acceso al empleo. ¿Cómo debe gestionarse?

Si una persona está buscando trabajo debe decírselo a todo el mundo. Los amigos y conocidos pueden hacerle un gran favor. Pueden informarle de las oportunidades de empleo que conozcan, presentarle a empresas o empleadores y ocuparse de que su currículo llegue a buenas manos.

Otra opción es crear o integrarse en un grupo de ayuda en la búsqueda de empleo. Pero además del grupo es muy conveniente tener a alguien próximo, un familiar o un amigo, que te anime a mantener la disciplina de la búsqueda.

Las candidaturas espontáneas a empresas de selección de personal pueden dar buenos resultados. ¿Qué hacen las consultoras con los currículums?

Generalmente los analizan, clasifican y guardan durante unos seis meses, y siempre que los currículos recibidos se adapten a los procesos de selección que les encargan sus clientes los consideran y convocan a entrevista a los candidatos.

Muchas veces las empresas de selección tienen escasez de candidatos adecuados para sus ofertas por lo que si una persona cree en sí misma y en sus posibilidades es conveniente que envíe su currículum.

El primer contacto entre empresa y candidato se establece a través del CV. ¿Qué debe contener para interesar a quien lo recibe?

Debe ser claro, concreto y sintético, facilitar su lectura a quien va dirigido, que probablemente tendrá que leer muchos, y más que buscar la originalidad en su elaboración lo que aconsejamos es orden y sistematización, para quequeden claros los principales méritos profesionales y educativos y otras experiencias y actividades del candidato.

La entrevista es la fase clave en la selección de personal. ¿Qué actitud recomienda al candidato?

Creo que tendría que decirse a sí mismo: debo estar convencido de que reúno méritos suficientes para el puesto, es más, puedo hacer mucho por la empresa que me contrate; voy a actuar como una persona que resuelve, no como un pedig?eño de trabajo.

¿Qué aconseja si se han agotado todas las acciones para encontrar empleo y éste no llega?

Nunca se agotan, pero si no se encuentra trabajo hay que revisar la estrategia de la búsqueda, las expectativas profesionales, de retribución, etc. y considerar otras ocupaciones para las que se esté preparado.

También debe tenerse en cuenta no sólo el mercado laboral más próximo o de la localidad, sino el de la provincia, comunidad, país y extranjero. Asimismo, puede ser conveniente realizar cursos de formación ocupacional e inscribirse como demandante de trabajo en las oficinas de empleo públicas. Lo importante es mantenerse activo y relacionarse con otras personas.

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