«El empleo no crece como antes lo hacía». Ésta es una de las premisas que se incluyen en el último ‘Avance del Mercado Laboral’ que realizan Analistas Financieros Internacionales (Afi) y la Asociación de Grandes Empresas de TrabajoTemporal (Agett) y que resulta ser la clave para entender cómo está el trabajo en España en estos momentos. Y es que si algo deja claro el informe es un ligero aumento de las tasas de paro en el tercer trimestre del año, aunque «no refleja una tendencia peor que la observada en los episodios de desaceleración de 2002 y 2003».

¿Y para los próximos meses? Más de lo mismo. Según los datos de la Afi y la Agett, en noviembre y diciembre el mercado mostrará índices similares a los de octubre, mientras que en enero se producirá una ralentización «muy suave», que situará los niveles de crecimiento del mercado laboral en un 3,1 por ciento.

No obstante, desde los dos organismos se advierte que «es muy pronto para afirmar que el aumento de paro es una señal de que el mercado laboral empieza a deteriorarse», si bienreconoce que «el incremento del paro es ya una realidad en la que, a su vez, se mantiene la creación de empleo». Eso sí, no es tan importante como en anteriores ocasiones.

Con las puertas abiertas

Aunque si algo debe quedar claro eso es que «no se están cerrando las entradas en el mercado laboral». Es decir, no hay más parados porque las empresas no contraten, sino porque éstas rescinden cada vez más contratos de sus empleados. Además, el mercado español da muestras de una flexibilidad mayor: los flujos de entrada y salida de trabajadores «siguen siendo intensos», aunque en unos sectores más que en otros.

En el caso de la construcción, la situación de incertidumbre y aumento del paro es ya casi habitual, aunque en este caso el ‘Avance del Mercado Laboral’ hace hincapié en el sector de la industria, donde se ha registrado el mayor número de salidas. Ahora bien, al ser el ámbito de la construcción el más sensible a la evolución de la economía y a la situación del mercado inmobiliario, se convierte en el sector donde los efectos de la ralentización laboral se han hecho más evidentes.

Aun así, y aunque parezca que el sector de la industria está relevando a la construcción, se trata del ámbito que «está contribuyendo a reducir la cifra de paro y mantiene ritmos estables de creación de empleo», apunta el estudio. El sector más incierto es, sin embargo, el de servicios, al aportar cada vez más parados al mercado e incorporar a menos.

Más dinamismo

Lo cierto es que el informe pone de manifiesto que en el tercer trimestre de este año la población activa ha adquirido dinamismo por el aumento del número de parados. Un incremento que no ha venido motivado por una mayor presencia de parados que buscan su primer empleo (ésta ha descendido en un 5,1 por ciento respecto al trimestre anterior), sino por una prolongación del tiempo de búsqueda de trabajo de los que ya están parados, a la vez que se incrementa el número de nuevos desempleados.

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