Por eso existe la prueba de acceso para mayores de 25 años. Esta alternativa está pensada precisamente para todas aquellas personas que no hayan podido, o querido, seguir el ciclo formativo habitual, deseen retomar sus estudios o, simplemente, iniciar otros.

No te asustes. Antes de que veas miles de obstáculos o de que te sientas incapaz, sigue leyendo, porque el origen de esta iniciativa en España es ofrecer todas las facilidades para que cualquiera pueda acceder a un título universitario.

Lo que debes saber:

  • Requisitos: Los únicos requisitos necesarios son tener al menos 25 años antes del 1 de octubre del año en el que hagas la prueba y no poseer el título de Bachillerato o equivalente. Si ya tienes esa titulación, en vez de este examen debes hacer la Prueba de Acceso a la Universidad (antes conocida como selectividad).
  • Preparación: La mayoría de las universidades ofrecen cursos para preparar la prueba de acceso, y hay academias y centros de estudios (CCC, CEAC…) que también pueden ayudarte. La gran ventaja es que puedes hacerlo desde casa. De hecho, es la alternativa más recurrida ya que la mayoría de los estudiantes compaginan esta preparación con su jornada laboral.
  • Examen: La prueba se realiza en la universidad a la que se quiere acceder y contiene una prueba común de lengua castellana, lengua extranjera (a elegir entre inglés, francés, alemán, italiano y portugués) y un comentario de texto sobre un tema de actualidad. La segunda parte, o prueba específica, permite elegir entre cinco ramas: científico-tecnológica, ciencias de la salud, humanidades, ciencias sociales y artes. Eso sí, la elegida tendrá que corresponder a la carrera que se quiere cursar.
  • Fecha de inscripción: Cada universidad establece un único plazo anual de inscripción. Puedes consultarlas todas en la web www.mayores25.com.

© Laboris – Redacción de 20 minutos 19-1-2010