Miquel Bonet, Director del Programa de Competencias de la Universitat de Barcelona iL3

La crisis es para todos, pero a unos les duele más, especialmente si formas parte de este colectivo que ya ha rebasado los 40 años y te encuentras sin trabajo, pero si este es tu caso, no te desesperes porque hay soluciones: lo importante es que te lo tomes con tranquilidad y confíes en tu experiencia, en tus conocimientos y seas activo en la búsqueda.

Para ello, debes informarte sobre las ofertas que existen en el mercado, qué se exige, qué condiciones tienen los que en posiciones similares están trabajando y no dejes de acudir a los intermediarios laborales como las ETT, Oficinas de Empleo, Prensa, Internet; debes comunicar al máximo de gente que estás buscando trabajo; la gente funcionamos con referencias, por tanto haz mucho Networking.

Pero es importante prepararse: cierta formación es necesaria, el mercado laboral pide determinados requisitos exigibles al puesto; por ejemplo, si hablamos de hostelería que recibe turistas, los idiomas son importantes; para trabajos de cara al público, la presencia física, la capacidad de comunicación; en el trabajo industrial, la capacidad y los recursos para resolver situaciones también son claves.

Existen ayudas concretas y gratuitas por parte de la administración que deben aprovecharse; por ello lo mejor y lo más económico es acudir al Servicio de Ocupación de cada ciudad, ellos te informarán, hay ayudas para el nuevo empresariado, también a través de organizaciones empresariales y sindicales y además está la autoformación; ten en cuenta que nadie va a aprender por ti, ni te van a regalar nada: prepararse y aprender siempre cuesta cierto sacrificio.

Piensa que la experiencia es un valor muy apreciado en todos los órdenes de la vida, especialmente en el ámbito laboral, pero debe saberse manejar; aprendemos más de los errores que haciendo las cosas aceptablemente, cada uno debe conocerse lo suficiente para saber lo que domina y demostrarlo cuando busca trabajo.

Pero lo más importantes es que tengas confianza: no hay que ir por el mundo pensando que «todo va mal» y que el mundo lo manejan simplemente los poderosos; a menudo el «culpar» a la sociedad, a los otros, a los empresarios, a la crisis, o a la administración, son simplemente excusas que limitan la motivación y la actitud. Cada día  sale el sol de nuevo y hay que verlo como una oportunidad; creo que deberíamos aprender a reinventarnos, como hicieron muchos profesionales en otros sectores; piensa que, a menudo, el principal enemigo es el negativismo y la mala actitud.

© Laboris
12-1-2010