Muchas son las formas en las que se inicia una actividad empresarial pero muy raramente nacen de algo tan poco organizado como una despedida de soltero. Federico, Ginés y Sebastián Navarro son tres hermanos que actualmente poseen el Grupo ALC con sede en Murcia. Esta empresa de comunicación tuvo su germen en la organización de fiestas para despedir la soltería pero aquella primera actividad ha desembocado en una compañía especializada en la organización de eventos lúdicos que van desde grandes actividades para ayuntamientos hasta espectáculos más modestos para particulares.

Sebastián Navarro explica que en el Grupo ALC se encargan de «la imagen corporativa del evento, la organización y el desarrollo». Los servicios incluyen un departamento de merchandising, organización de infraestructuras y elaboración de todo tipo de soportes. Últimamente, la compañía ha participado en actos tan destacados como el Gran Premio de Motociclismo de Jerez, donde colaboraron en la organización de varias actividades lúdicas. «La Dirección General de Tráfico y Televisión Española habilitaron una zona de 30.000 metros cuadrados para quitar las motos del centro de Jerez donde se celebraron conciertos, hubo máquinas de atracciones y nosotros participamos ampliamente en el evento», explica.

Desde hace dos años la empresa familiar ha comenzado a crecer a un buen ritmo aunque Sebastián asegura que siguen tratando con el mismo interés a todos los clientes, «desde el más grande al más modesto porque así nos gustaba a nosotros que nos trataran cuando iniciamos nuestro negocio», aclara.

De hecho, la evolución de Grupo ALC ha sido constante pero partiendo desde lo más sencillo como recordaban sus propietarios: «empezamos organizando despedidas de soltero pero poco a poco nos fuimos introduciendo en el sector de los espectáculos para discotecas y comenzaron a solicitarnos para la organización de eventos y luego incluimos los apartados de merchandising y creatividad para dar un servicio más completo al cliente».

Aumento de la plantilla

Un total de 15 personas trabajan para la empresa en estos momentos y dos empleados más se incorporarán en breve. La empresa, que nació en Ontur (Albacete), ahora cuenta en Murcia con una superficie de más de 100 metros cuadrados utilizados como almacén y otros tantos dedicados a tienda, a los que hay que sumar 200 metros cuadrados más que acogen las oficinas. El reto que se plantean en el Grupo ALC para el nuevo año es abrir una nueva sede en Madrid.

Sobre las dificultades para poner en marcha el negocio, Sebastián Navarro asegura que el principal problema que tuvieron que afrontar en sus inicios fue la financiación. «Ahora si vienen los bancos a ofrecernos productos pero cuando más falta te hace un crédito, que es cuando empiezas, todo son dificultades», afirma el emprendedor.

Otro de los obstáculos con los que han tenido que luchar esta joven sociedad es la tardanza de los pagos porque según el empresario «la cultura de pago en España está un poco retrasada y era difícil de soportar que organizáramos un evento para un ayuntamiento y que nos pagase seis u ocho meses después. Aguantamos el tirón y ya estamos posicionados en este mercado».

En cuanto a la percepción de ayudas, Navarro explica que las han solicitado pero «lo único que hemos recibido ha sido algún crédito en buenas condiciones pero nada demasiado importante».

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