La incorporación de tecnologías como el big data y la inteligencia artificial que buscan mejorar la experiencia del viajero, han venido generando una revolución en el sector turístico y lo han llevado a asumir un cambio estratégico, apoyado en la transformación digital. Lo anterior se centra en la ciudad inteligente como base del paradigma de destino turístico inteligente que conllevan la aplicación de una gestión turística 4.0, completamente diferente a la gestión turística tradicional, pero eso si sobre la base de la sostenibilidad.