Uno de los rasgos diferenciadores del grado en Ingeniería Biomédica por la Universidad Autónoma de Madrid es la interdisciplinariedad de su plan de estudios, que integra asignaturas de carácter biomédico, científico e ingenieril con numerosas prácticas, así como prácticas externas y rotatorios. Esto permite a quienes se gradúan adquirir nuevas competencias altamente atractivas para el sector profesional biomédico, un campo en continua evolución ligado a la innovación, al emprendimiento y a la mejora del impacto socioeconómico. Finalizar el grado en Ingeniería Biomédica aporta la formación necesaria para trabajar en organismos de salud públicos y privados tales como hospitales, centros de imagen biomédica y en instituciones multidisciplinares de I+D+I, así como en empresas dedicadas al avance tecnológico y a su aplicación en las áreas biomédicas, de bio-señalización, de adquisición y de tratamiento de datos relacionados con la salud y de rehabilitación. Además, debido a su formación mixta en medicina e ingeniería, las y los profesionales de Ingeniería Biomédica realizan una función no solo técnica, sino también de coordinación e interconexión, desarrollando sus competencias tanto en el campo clínico-biomédico como en el científico-técnico. La Ingeniería Biomédica es una disciplina innovadora que genera también muchas oportunidades para el emprendimiento y la creación de nuevas empresas basadas en el desarrollo tecnológico en el ámbito biomédico, de la salud, del deporte y del bienestar social.