Una óptima conservación de la red de carreteras es fundamental para garantizar la seguridad en el tránsito, sin que ello comprometa su necesaria fluidez; de ahí que sea preciso prestar especial atención al estado del firme, a fin de que, ante la detección de un daño o deterioro, sea factible proceder a restituirle sus características funcionales en el menor lapso de tiempo posible, ya sea mediante operaciones de vialidad (que son las que demandan actuaciones más urgentes), de conservación (ordinaria o extraordinaria) o de mejora.

A lo largo de este Curso de Rehabilitación y Patología de Pavimentos, el alumnado descubrirá los distintos tipos de deterioros a solventar (entre ellos, baches, agrietamientos, ondulaciones...) y las particularidades de los tratamientos a acometer; de tal modo que, al término de su formación, podrá identificar los daños detectados y sus causas, prever cómo será su evolución, determinar la urgencia de su reparación y definir cómo ha de acometerse.