El entrenamiento de la resistencia durante el embarazo ha recibido históricamente mucha más atención científica que el de la fuerza muscular. En nuestra opinión, los prejuicios infundados y el desconocimiento profundo del entrenamiento de la fuerza adaptado a las necesidades y características de la gestante han impedido que los investigadores centraran inicialmente su atención en el potencial de este tipo de entrenamiento y los beneficios que podía conllevar para el bienestar y salud materna. De hecho, antes del año 2000 a penas se encuentran estudios o recomendaciones generales que apoyen o se interesen por los efectos del ejercicio de fuerza para esta población.
Es especialmente a partir del año 2009 cuando empiezan a irrumpir estudios preliminares de intervención y guías actualizadas que recomiendan incorporar el ejercicio de fuerza durante el embarazo. El principal argumento para comenzar a recomendar este tipo de ejercicio es el potencial beneficio que aporta para la salud materna (v.g.: reducir dolor lumbar y mejorar la postura, prevenir la incontinencia urinaria, mejor control del aumento de peso, etc.)
Emagister S.L. (responsable) tratará tus datos personales con la finalidad de gestionar el envío de solicitudes de información y comunicaciones promocionales de formación con tu consentimiento. Ejerce tus derechos de acceso, supresión, rectificación, limitación, portabilidad y otros, según se indica en nuestra política de privacidad.
Temario completo de este curso