Facilitar el conocimiento del arte contemporáneo al público «eliminando la frialdad que a priori se le achaca a este sector». Ése era el objetivo de Raquel Aranda y Raquel San-tamaría cuando a finales de 2005 decidieron montar su propia galería de arte: TRIBECA. «Es el resultado de la galería en que a nosotras nos gustaría trabajar», afirman estas emprendedoras.

¿Por qué una galería de arte? «Conocíamos el sector y pensábamos que existía un nicho de mercado para una galería con una estética y gestión similar a las de las galerías de Nueva York, en la cual pudiéramos democratizar el arte y hacerlo accesible a todos los públicos», explican. Así, con esa idea, se pusieron manos a la obra, y aunque la búsqueda de local «fue complicada», encontraron el sitio ideal en el Barrio de las Letras de la capital. «Queríamos un local acorde a nuestros artistas y donde las obras de arte pudieran apreciarse con la magnitud que se merecen».

El resultado es un espacio de calidad, y muestra de ello es que la ‘galería de las Raqueles’ (como mucha gente llama a Tribeca) recibió en 2006 el Premio a la Iniciativa Empresarial de la Asociación de Jóvenes Empresarios y el año pasado el Premio Mujeres Empresarias Avalmadrid. Además, ha participado en la Feria de Arte de Shangai y en el Art Now Fair de Miami. Y para este año, más y mejor: además de haber estado presente en ARCO 08, participará en el certamen de Photoespaña. Algo que «ha dado a la galería el prestigio que suple el tener una empresa de tan corta trayectoria».

Nada de tradicionalismos

Pero Tribeca es también una empresa, y sus fundadoras son muy conscientes de ello. Por eso, han ampliado las líneas de negocio creando un departamento de empresas, «pues Tribeca es conocedora de la importancia de la imagen que debe transmitir una empresa», afirman. Se trata de un departamento especializado en la decoración de oficinas (asesoramiento de imagen y renting de arte) y en el servicio de regalo de empresa, que recibe el nombre de ‘Empresas con arte’. Para ello, cuentan con «un equipo de profesionales cualificados que asesorarán en función de las necesidades de cada empresa, adaptándonos a su presupuesto».

Y en unos momentos en los que internet es el rey de toda iniciativa, Tribeca no ha querido quedarse al margen. Por eso, sus fundadoras están desarrollando una tienda virtual «que verá la luz en pocos meses», anuncian. A través de ella, se incentivará la compra on line y, además, «nos acercará más a todos nuestros clientes, sin descuidar el trato y la flexibilidad que nos han caracterizado desde nuestros comienzos». ¿El objetivo? «Que cada vez sean más los socios del Club Tribeca, mediante el cual se inician en el coleccionismo de arte». Y para ello, editan obras seriadas con la intención de permitir la adquisición de obras originales de artistas de prestigio «a un precio inferior». ¿Quién ha dicho que el arte no está al alcance de todos?

Fomentar el coleccionismo

Si algo tenían claro las fundadoras de Tribeca, Raquel Aranda y Raquel Santamaría, a la hora de poner en marcha su negocio era fomentar el coleccionismo «a todos los niveles». Y nada mejor que hacerlo sin marginar estilos ni soportes. Reúnen, así, obras de artistas internacionales consagrados y de jóvenes talentos españoles «apoyándolos en su futura proyección internacional», subrayan.

Y es que de lo que se trata es de eliminar el concepto del mercado del arte español como un sector exclusivo y desarrollar la tendencia al coleccionismo, algo que «la galería Tribeca fomenta flexibilizando y acercando el mundo del arte a todos».

Más información:

Galería Tribeca

Tel.: 914 299 869

tribeca@galeriatribeca.com

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