El conductor de autobús es el responsable de efectuar el transporte de viajeros por carretera de manera segura, responsable y económica. Para ello, verificará el estado técnico del vehículo y sus equipos auxiliares mediante comprobaciones de seguridad periódicas. De igual forma, colaborará en la conservación y en el mantenimiento preventivo del autobús, a fin de obtener su máximo rendimiento para realizar los servicios sin contratiempos de ningún tipo. Por este motivo, también tendrá que estar preparado para detectar y localizar las averías mecánicas que puedan surgir en ruta, así como para orientar a los pasajeros.

Aspectos técnicos aparte, la misión principal del conductor de autobús es la de conducir el vehículo de manera correcta, respetando los horarios e itinerarios establecidos, con el objeto de garantizar la seguridad de los pasajeros y la realización eficiente del servicio. Asimismo, deberá estar pendiente de la entrada y salida de pasajeros, las operaciones complementarias de expedición de billetes, y la carga y descarga de equipajes.

Por último, el conductor actuará también en caso de accidentes o siniestros, proporcionará información a los viajeros y canalizará las quejas o reclamaciones de los mismos.

¿Qué formación necesitan?

El único requisito para acceder al curso de formación para conductores de autobús es haber obtenido el título de la Enseñanza Secundaria Obligatoria (E.S.O.). No se requieren condiciones físicas especiales, aunque quedarán descartadas aquellas personas con discapacidades que impidan el desarrollo normal de la profesión.

El itinerario formativo está compuesto por 405 horas totales, divididas en 100 de clases teóricas, 280 de clases prácticas y 25 de evaluación. El curso se estructura en siete módulos que incluyen las herramientas para conseguir el carné de clase D, obligatorio para conducir autobuses.

Los módulos tratan sobre la estructura sectorial y la orientación en el mercado de trabajo del transporte por carretera; la circulación y la seguridad vial; la gestión de la actividad del conductor de autobús; la mecánica y el mantenimiento preventivo del vehículo; la atención al cliente; las aplicaciones telemáticas al transporte, y la seguridad e higiene en el trabajo.

¿Qué perspectivas laborales tienen?

Aunque los conductores de autobús pueden trabajar tanto en el sector privado como en el público, es en este último donde hay un mayor porcentaje de ocupación. Y es que la empresa del sector público por carretera, tanto de mercancías como de viajeros, ha planteado el problema de la falta de conductores profesionales, lo que les impide dar una respuesta adecuada a las demandas en la prestación de sus servicios.

El conductor de autobús puede acceder a los mercados de trabajo locales, autonómicos, nacionales e internacionales. Por otro lado, también existe la posibilidad de ejercer como profesor de autoescuela, obteniendo la cualificación necesaria para ello. Además, su perfil es el indicado para la conducción de otros vehículos pesados. En todos los casos el salario medio ronda los 1.200 euros mensuales por 40 horas de trabajo semanales.

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