Todos tenemos un archivo de texto en el que figuran nuestros datos de contacto y experiencia laboral. Currículum vítae: documento que abre o cierra oportunidades laborales. ¿Consideras que tu currículo te representa y tiene toda la información que te interesa dar para conseguir una entrevista? ¿Cuándo fue la última vez que te detuviste a revisar tu currículo a conciencia?

El Ministerio de Trabajo e Inmigración de España indica que la competencia por los puestos de trabajo es cada vez mayor. ¿Cómo diferenciarte en el mercado? ¿Puede tu currículo ayudarte en ello? Claro que sí. Para empezar, define tu objetivo: qué quieres hacer, y cuáles son tus pretensiones profesionales y económicas. Recuerda que siempre estás a tiempo de realizar cursos que consoliden o marquen tu especialización.

Enciende el ordenador y, con la vista puesta en tu CV, hazte las siguientes preguntas:

  • ¿Tienes un perfil al inicio? Está claro que no se puede modificar la experiencia laboral, pero sí puedes ajustar tu perfil para orientarlo según la propuesta de trabajo a la que envíes tu CV. Personaliza tu CV redactando tres o cuatro líneas sobre ti al inicio del documento. Resume tu especialización como profesional, así como tus temáticas de interés.
  • Existen múltiples formas de mostrarte. El currículo solía ser el primer contacto entre un responsable de recursos humanos y los posibles candidatos. Hoy no siempre es la puerta de entrada para una entrevista. En la actualidad los reclutadores llegan a los candidatos a través de: webs de empleo y redes sociales profesionales.

  • Crea tu marca personal. Establece una imagen profesional y sé coherente con lo que muestras de ella en un CV impreso tanto como en una carta de presentación y en tu perfil en una red social profesional. Huye de las ideas “creativas y originales” que dotan a tu perfil profesional de “personalidad dejando una huella”. La simplicidad enfoca la atención sobre lo importante en tu CV y si eres válido, no necesitas más armas. Guarda tus armas expresivas para una entrevista personal.
  • Sé prudente con las redes sociales. Si tu trabajo no lo amerita, una vida virtual muy activa puede ser negativo para tu candidatura e incluso confundirse con la adicción a los medios sociales.
  • Coloca una imagen. Salvo petición expresa de la compañía en determinados procesos de selección, siempre se miran más candidaturas con fotos que sin ellas. Puedes salir de la tradicional foto en traje con fondo blanco, pero no vayas mucho más lejos: evita imágenes de baja calidad y de excesiva alegría. Es un CV, no una fiesta. Hay que ser positivo, pero también transmitir seriedad.
  • Sé breve y concreto. No te elegirán por poner más cantidad de información, sino porque la información que colocas es lo que están buscado. Eso fomentará el interés que da acceso a una segunda entrevista. Demasiada información puede ser abrumadora y transmite la sensación de que tu perfil no está especializado en un área en concreto, factor importante en la actualidad.

Ten siempre en cuenta que un currículum vítae cambia de acuerdo al tiempo de experiencia de la persona. Los más jóvenes deben enfatizar sus estudios ya que poseen poca o ninguna experiencia, mientras que para los profesionales con varios años en activo es importante resumir sus cargos más importantes.

Para tener ampliar estas recomendaciones y ajustarlas según tu perfil, consulta el apartado dedicado al CV de Laboris.

© Laboris – 21-10-2011