Recuperar el sabor de las tradicionales cervecerías castizas. Éste es el principal objetivo con el que nace la enseña La Madrileña, firma que remonta sus orígenes al año 2000 y que en 2008 ha decidido continuar su crecimiento a través del sistema de franquicias. Según explica el director general de la firma, José Mª Nombela, «en estos años, y tras el éxito del primer establecimiento que abrimos en Majadahonda, hemos puesto dos más en funcionamiento, ambos en la capital, uno en Cuatro Caminos y otro en La Latina. Después de comprobar la rentabilidad del negocio a través de los tres establecimientos propios, hemos decidido continuar nuestro crecimiento a través del sistema de franquicias».

Una decoración muy cuidada, unida a una oferta gastronómica de platos típicos madrileños, «con un toque actual», completan la definición de este concepto. Además, los futuros franquiciados podrán optar por dos modalidades de negocio diferentes: la cervecería, cuya actividad se centra en «la de una cervecería tradicional, con una amplia carta de tapas y raciones, donde los productos no necesitan casi elaboración», y la cervecería-restaurante, con estas dos zonas perfectamente diferenciadas. En el primer caso se necesitará menos personal y, en el segundo, una cantidad mayor.

El plan de franquicia que acaba de poner en marcha la marca pretende finalizar el actual ejercicio con tres nuevos establecimientos operativos, que se unirán a los tres propios con los que ya cuenta en Madrid capital. Sin olvidar que la intención de sus responsables es «crecer por toda España», como bien señala José Mª Nombela.

Clientes satisfechos

Desde La Madrileña tienen claro que su principal objetivo es la satisfacción máxima de clientes y franquiciados. De ahí que el plan estratégico de negocio diseñado por la enseña contemple cada uno de los sectores necesarios para triunfar en un ámbito caracterizado por su amplia competencia.

Tres son los pilares en los que se fundamenta la filosofía de este negocio: calidad en el servicio, ambiente agradable y comida sana a un precio competitivo. Todo ello en un local muy caracterizado por un ambiente que recrea a las tradicionales cervecerías castizas: con el ladrillo visto como protagonista y acompañado de azulejos personalizados, además de madera y forja.

La homogeneización de la oferta, un servicio de calidad, una plantilla dimensionada y un control informático de la gestión son algunos de los servicios que la central pone a disposición de sus futuros franquiciados. Como afirma el propio director general de la empresa, «el concepto de negocio está configurado para ofrecer una cobertura total a cada una de las unidades operativas a través de un soporte global que asista a todas las necesidades que puedan tener».

El objetivo de futuro de La Madrileña es continuar con su crecimiento y establecerse en todo el territorio nacional. Lo que ofrece a sus franquiciados es la recuperación de la inversión en un plazo corto de tiempo, sin necesidad de que cuenten con una preparación especial en restauración.

Al frente de tu propio negocio

Los futuros franquiciados deben contar con un claro espíritu emprendedor.

«Buscamos personas con un espíritu emprendedor, con ganas de gestionar su propio negocio». Con estas palabras resume el director general de La Madrileña, José Mª Nombela, el perfil de franquiciado que demanda para su enseña. Y prosigue: «Más que experiencia en el sector, nos interesa que tenga aptitudes comerciales y un buen trato con el cliente, además de habilidades en la gestión y dirección de personal».

Si la persona interesada carece de experiencia o preparación previa, la central se encarga de formarle, tanto antes de la puesta en marcha del local como posteriormente. «Realizaremos visitas periódicas a los establecimientos franquiciados para comprobar que se mantienen los estándares de calidad establecidos, al mismo tiempo que prestaremos toda la asistencia necesaria a la red. Además, informaremos a nuestros franquiciados de las últimas tendencias gastronómicas para completar sus conocimientos y así ampliar la oferta», concluye Jose Mª Nombela.

A la hora de captar a sus futuros franquiciados, internet es el medio fundamental que están empleando en estos momentos.

Diferentes variables económicas

El pago de los diferentes conceptos vendrá determinado por el modelo de franquicia elegido.

Los datos económicos que hay que tener en cuenta para la puesta en marcha de un establecimiento de La Madrileña variarán en función delmodelo de franquicia elegido.

En el caso de la cervecería, la inversión inicial es de 252.462 euros, en un local de 100 metros cuadrados y con el pago de un ‘royalty’ de mantenimiento de 600 euros durante el primer año, 700 durante el segundo y 800 el tercero.

Si nos fijamos en la cervecería-restaurante, la inversión asciende a los 335.416 euros, para un local de 200 m2y con un ‘royalty’ de 800 euros el primer año, 1.000 euros el segundo y 1.250 el tercero. El resto de conceptos son comunes. Así, la amortización se produce entre los 30 y los 36 meses desde la puesta en marcha. El canon de entrada es de 18.000 euros y el de publicidad será progresivo los tres primeros años: 350, 450 y 575 euros cada uno.

Más información:

Cervecería La Madrileña

Tel.: 916 390 472

www.lamadrilena.com

restauranteslamadrilena@telefonica.net

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