¿Cansad@? ¿No te puedes concentrar? ¿Tienes mal humor?  Si la respuesta es sí, es necesario encontrar el origen de tu malestar de descanso. Las personas que sufren insomnio tienen más probabilidades de tener depresión, ansiedad, hipertensión y algunas enfermedades crónicas.

Con motivo de la celebración del Día Mundial del Sueño, que este año lleva como lema “Dormir bien, envejecer con salud, se resalta la importancia que tiene en la población de mayor edad y, en general, para nuestra salud, el hecho de descansar.

Dormir mal es considerado por la Organización Mundial de la Salud (OMS) como una enfermedad de salud pública que afecta la vida escolar, universitaria, laboral y social de las personas.  Según la OMS sólo el 10% de quienes sufren insomnio acude a una consulta médica, y únicamente el 5% es correctamente diagnosticado.

El número de horas de sueño para estar descansados varía de una persona a otra. Mientras que algunas sólo necesitan dormir entre 5 y 6 horas, otras precisan 10 o más. No obstante, lo normal es que un adulto sano duerma un promedio de 8 horas.

En el Día Mundial del Sueño te damos algunos consejos para conciliar el sueño:

• Mantener un horario regular, acostándote y levantándote a la misma hora cada día.

• Elimina del ambiente cualquier molestia como ruidos o exceso de luz.

• Si haces ejercicio, que sea a una hora regular todos los días. El deporte estimula y el cuerpo tardará más tiempo en relajarse.

• No te acuestes con hambre, ni después de una comida muy pesada; cena dos horas antes de irte a dormir.

• No consumas café, té, refresco, alcohol, tabaco ni cacao antes de dormir.

• Evita las discusiones antes de acostarte. No te lleves los problemas a la cama.

• Antes de dormir, ve desacelerando tu actividad, no hagas tareas que requieran mucha concentración, ni trabajes hasta última hora.

• Mantén horarios regulares de alimento, ejercicio y sueño.

• No trabajes en la cama o en tu habitación, esto le da a nuestro cerebro un lenguaje equivocado de lo que significa nuestro descanso.

Dormir bien nos da la energía para comenzar retos, estar más positivos, beneficia a la salud, a la mente y al cuerpo. ¡Duerme bien para que vivas mejor!

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