Sólo uno de cada diez españoles asegura que tiene un nivel avanzado de inglés

Sólo uno de cada 10 españoles dice tener un nivel avanzado de inglés y el 50% reconoce que el colegio “le sirvió de poco” a la hora de mejorar su nivel, según una encuesta sobre el aprendizaje de idiomas realizada por la Organización de Consumidores y Usuarios (OCU).

La encuesta, realizada entre 800 españoles de entre 18 y 60 años, recoge que un 94% de los españoles declara haber estudiado un idioma extranjero pero uno de cada tres reconoce su insatisfacción con el nivel alcanzado.

En cuanto a los idiomas, el inglés es el idioma más estudiado por un mayor número de personas, en concreto un 57% de españoles prefiere esta lengua frente al 18% que estudió francés. El resto de españoles, un 8% elige el alemán; un 6 por ciento ha estudiado italiano; y un 2%, portugués.

Asimismo, el sondeo indica que la mitad de los españoles han tomado, en alguna ocasión, clases de idiomas en España, por ejemplo en la Escuela Oficial de Idiomas, Academias o profesores particulares y consideran que este método “les ayudó más a mejorar su nivel”. Por otro lado, apunta que los que reciben clases en el trabajo son “los más insatisfechos”.

En cuanto a la satisfacción con el nivel del idioma estudiado, los españoles que se han dedicado al italiano son los únicos que aseguran poseer un nivel avanzado, en un 18%. Mientras, los datos recogidos muestran que para el resto de idiomas -a excepción del inglés– “la situación es peor”.

Además, un 60% de los encuestados reconoce haber utilizado métodos de auto aprendizaje en algún momento. Sin embargo, el informe destaca que la mejor manera de aprender un idioma es, según los entrevistados, pasar un tiempo en el extranjero. En este sentido, indica que los que estuvieron más de seis meses estudiando o trabajando fuera, son los que notaron mayores progresos.

Por último, la OCU ha subrayado que la inversión en formación “es fundamental, especialmente en situaciones de crisis”. Por ello, la organización pide que se limite la subida de tasas y se amplíe el número de plazas de las Escuelas Oficiales de Idioma; se implante, de forma generalizada, la enseñanza de una segunda lengua extranjera en el sistema educativo español; y se potencien fórmulas que hagan más asequible aprender idiomas en el extranjero.