Un reciente estudio de McKinsey es el punto de partida del colaborador de Forbes, Martin Zwilling, para debatir cuáles serían las mejores fórmulas de los empresarios para motivar a sus trabajadores y que no sea el dinero.

Martin Zwilling es fundador y CEO de Startup Professionals, una compañía que ofrece servicios a fundadores de startup en todo el mundo. Su perfil incluye 30 años de experiencia como manager, desarrollo de software, dirección de producción y marketing.

Zwilling cree que las medidas no monetarias motivadoras pueden ser más eficaces a largo plazo de los incentivos financieros.

Entre sus propuestas destaca:

Energía al equipo. El líder debe transmitir la pasión y la energía positiva a su equipo día a día.

• Más allá del trabajo. El empresario debe saber que hay vida más allá del trabajo y que hay que guardar cada día tiempo y energías para la vida saludable, la reflexión, etc.

• Los empleados, primero. Ninguna compañía es mejor que la plantilla que la forma. Y hay que hacérselo saber.

• Actuar con integridad. Hay que mostrar a los empleados que se valora la integridad y que ésta ayuda a crear sentido de pertenencia.

• Ser un gran comunicador. El liderazgo es influir en los demás y esto no puede lograrse sin una comunicación efectiva.

Ser un gran oyente. Los líderes más eficaces son los que se toman el tiempo para escuchar las palabras de los miembros de su equipo, y además, entenderlas.

• Solucionar problemas. Hay que guiar al equipo hacia las soluciones.

Experiencia. La experiencia y la competencia son valores más importantes que el cargo o posición que se ocupe en una empresa. El líder debe ser mentor de sus empleados, animarles, ser un compañero de viaje, etc.

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